Se trataba de reformar un pequeño piso antiguo para una joven mujer que deseaba convertirlo en una casa amplia y cómoda para vivir sola. Por esta razón, la distribución se organizó de modo que las diferentes estancias se comunican entre sí, para favorecer la fluidez, lumino- sidad e intercomunicación de los espacios del apartamento. La decoración y el mobiliario fueron también parte de la intervención, consiguiendo un resultado unitario y coherente.
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